Todos los tópicos de que es una gran oportunidad, que se crece como persona, que se aprende un idioma, una nueva cultura, que se conocen nuevos puntos de vista, todos ellos... son ciertos.
Y es que la experiencias Erasmus es única, te enfrentas a un país en el que lo más normal es que no conozcas su idioma, solo tienes tu idioma y lo que hayas aprendido de ingles, y con eso, vas aprendiendo, entonces te das cuenta que el “spanglish” no es tan mala idea, pero eso dura poco. Conoces gente nueva desde el minuto 0, te ayudan en todo con las clases y la adaptación a la nueva universidad, así que quieras o no aprendes, cada persona tiene algo que enseñar, un idioma y con ello una nueva cultura, y eso no es poco, implica tal cantidad de cosas que solamente puedes llegar a entender fuera de tu país y que desde luego hacen de la experiencia Erasmus casi una obligación para todos los estudiantes.
Yo me ido casi con una mano delante y otra detrás, sin saber que hacer, porque desde la UPNA no se nos ha ayudado nada, relaciones exteriores no es que sea un departamento muy trabajador, pero bueno... he tenido que aprender a sacarme las castañas del fuego y todo son experiencias que hacen que madures y crezcas.
Si hay que hablar del dinero, también es una triste realidad, es caro. Las ayudas llegan muy tarde, y son más limosnas que otra cosa, si no tienes la suerte de poder pagarlo es una gran problema. La EU debería destinar más dinero aquí, porque mayor fabrica de Europeos que el programa Erasmus no hay, y desde luego el Gobierno de España debería aplicarse, es una forma de que los estudiantes conozcamos como se está trabajando en otros países y con ello de poder traer mejoras y progresos para nuestro país. El programa Erasmus supone mucho para los estudiantes, pero también puede suponer muchísimo más para el país.
Jorge Crespo Ganuza
Estudiante de Sociología en la Universidad Pública de Navarra y miembro de SADAR.
No hay comentarios:
Publicar un comentario